Calculadora de RPM

Esta calculadora de RPM te ayuda a entender qué son las RPM y cómo calcular la relación entre la velocidad de un vehículo y las RPM de su motor. También puedes utilizarla como calculadora de RPM a km/h.

En la primera parte se explica la definición de RPM y su amplio uso en la industria automovilística. En la segunda parte, verás cómo se relacionan las RPM de un motor con la velocidad del vehículo, y comprenderás los efectos de la transmisión y el tamaño de los neumáticos. Por último, te mostraremos, usando un ejemplo, cómo usar nuestra calculadora de RPM.

Todos hemos oído el término “RPM” y hemos visto un indicador de RPM (tacómetro) en el panel de instrumentos de un automóvil. Probablemente, también nos hemos dado cuenta de que el ruido del motor aumenta con las RPM. Pero, ¿qué son exactamente las RPM? ¿Por qué se utilizan tanto cuando hablamos de automóviles y motores?

El término RPM puede emplearse para cualquier objeto giratorio. Significa revoluciones por minuto o rotaciones por minuto. Técnicamente, RPM es una unidad de velocidad angular 🇺🇸; pero en realidad, se emplea más a menudo para decir cosas como “las RPM del motor”, lo cual significa realmente: “la velocidad de rotación del motor”. Es similar a cuando decimos: “¿A cuántos km/h anda tu automóvil?”, en lugar de “¿A qué velocidad anda tu automóvil?”.

Quizá te preguntes qué entendemos por “rotación del motor” ¿Qué es exactamente lo que gira en el motor? Porque, desde luego, ¡no es todo!

Bueno, en términos muy simplificados, en un motor de combustión interna, el combustible y el aire se queman en los cilindros y empujan los pistones. Estos pistones están unidos mediante bielas a algo llamado cigüeñal. Este mecanismo transforma el movimiento lineal de los pistones en rotación del cigüeñal.

Es a esta rotación del cigüeñal a la que nos referimos cuando hablamos de RPM del motor.

En un motor eléctrico, las corrientes eléctricas y los imanes generan campos magnéticos que interactúan con las bobinas de lo que llamamos el rotor. Se crea un torque mecánico que actúa sobre el rotor y genera su rotación. La velocidad de rotación del rotor son las RPM del motor eléctrico. Ve a la calculadora de torque para profundizar.

Ahora que entiendes la definición de RPM y cómo se crea la rotación del cigüeñal (o la rotación del rotor), sigue leyendo para aprender cómo calcular las RPM, qué es una relación de transmisión, y ver la relación entre la velocidad de las ruedas y las RPM del motor utilizada en esta calculadora de RPM a km/h

No dejes de consultar también nuestra calculadora del coste del combustible.

En las secciones siguientes, nos referiremos a las rotaciones del motor por minuto simplemente como “RPM”. Nos referiremos a cualquier otro elemento giratorio por su nombre (por ejemplo, diremos “RPM de las ruedas” cuando nos refiramos a la velocidad de las ruedas en rotaciones por minuto).
Antes de aprender a calcular las RPM, veremos qué factores influyen en las RPM de un motor y qué partes móviles de un automóvil están relacionadas con las RPM.

Continuemos nuestro viaje a través de las partes móviles de sistema de propulsión de un vehículo que comenzó en los cilindros del motor: tras llegar al cigüeñal, el movimiento de rotación continúa a través de la transmisión del vehículo, compuesta en su mayor parte por acoples mecánicos y engranajes. Estos engranajes, situados en la caja de cambios y la transmisión final, toman las RPM como velocidad de entrada y las transforman en una velocidad diferente en su eje de salida, vinculado a las ruedas motrices. Por tanto, esta velocidad de salida es la velocidad de las ruedas, y la relación o cociente entre la velocidad de las ruedas y las RPM se denomina “relación de transmisión”.

Esta relación entre las RPM y las RPM de las ruedas puede expresarse mediante la siguiente ecuación:

RPM = RPM de las ruedas × Relación de transmisión

Gracias a la caja de cambios, esta relación de transmisión puede tomar distintos valores para distintas situaciones de conducción. Esto es crucial para el funcionamiento correcto y eficaz del sistema de propulsión de un vehículo. Pero esa es otra historia…

Tras llegar a las ruedas motrices, el movimiento de rotación del sistema de propulsión se transforma en un movimiento lineal del propio vehículo gracias al contacto entre los neumáticos y la carretera. La relación de esta transformación final depende únicamente del tamaño del neumático, y más concretamente, del diámetro del neumático. Puedes encontrar fácilmente los diámetros de los neumáticos en las tablas de tamaños de neumáticos disponibles.

Esta relación entre las rpm de las ruedas y la velocidad del vehículo puede expresarse en esta segunda ecuación:

Velocidad del vehículo (km/h) = RPM de las ruedas × D” × π × 60 / 39370,

donde:

• D” es el diámetro del neumático, en pulgadas;
• π representa el cociente entre el perímetro del neumático y su diámetro;
• 60 es el número de minutos (de “vueltas por minutos”) en una hora (de “km por hora”); y
• Usamos 39370, puesto que ese el número de pulgadas (de diámetro del neumático) en un kilómetro (de “kilómetros por hora”).

Si el diámetro del neumático se encuentra en milímetros, podemos usar entonces la siguiente fórmula:

Velocidad del vehículo (km/h) = RPM de las ruedas × D (mm) × π × 60 / 1000000,
(usamos 1000000, puesto que ese es el número de milímetros en un kilómetro).

Si el diámetro del neumático se encuentra en pulgadas y requieres la velocidad en millas por hora (mph), podemos usar entonces la siguiente fórmula:

Velocidad del vehículo (mph) = RPM de las ruedas × D” × π × 60 / 63360,
(usamos 63360, puesto que ese es el número de pulgadas en una milla).

Ahora que hemos cubierto el trayecto desde la combustión del combustible hasta el movimiento del automóvil, podemos ver que existe una relación directa entre las RPM y la velocidad de un vehículo; y esta relación depende solo de dos factores: La relación de transmisión y el diámetro de los neumáticos.

En la siguiente sección, veremos cómo podemos utilizar nuestra calculadora de RPM para convertir rápida y fácilmente las RPM en km/h y viceversa.

En pocas palabras, con esta calculadora de RPM, puedes calcular cualquiera de las RPM, la velocidad del vehículo, la relación de transmisión o el diámetro de los neumáticos, ¡proporcionando las otras tres!

Por ejemplo, supongamos que conduces un automóvil a 100 km/h, llevas la 3.ª marcha y el tacómetro indica 3500 rpm. Sabes que el código de tus neumáticos es 185/55R15.

1. En primer lugar, puedes consultar una tabla de tamaños de neumáticos o, más cómodamente, utilizar nuestra calculadora de tamaños de neumáticos para obtener el diámetro de tus neumáticos. En este caso, obtendrás:
   • Diámetro del neumático = 23 pulgadas.
2. A continuación, introduce el diámetro de tu neumático en el campo Diámetro del neumático.
3. Introduce tus RPM en el campo RPM.
4. Finalmente, introduce tu velocidad en el campo Velocidad del vehículo.

La calculadora de RPM te dará la relación de transmisión correspondiente a la 3.ª marcha en el campo Relación de transmisión (= 3.85). Ten en cuenta que se trata de una relación entre dos velocidades de rotación, por lo que no tiene unidad. La calculadora también te da la velocidad de rotación de las ruedas en el campo RPM de las ruedas (= 908 rpm).

Supongamos ahora que deseas adquirir un nuevo juego de ruedas más deportivas para tu automóvil. Estás pensando en unas llantas de 17 pulgadas en 205/45R17, y quieres saber cuáles serían tus RPM cuando circules a 100 km/h en 3.ª marcha.

¡No hay problema! Todo lo que tienes que hacer es:

1. Calcular el nuevo diámetro de tu neumático utilizando nuestra calculadora de tamaño de neumático e introducir este nuevo valor en el campo Diámetro del neumático de la calculadora de RPM. En este caso:
   • Diámetro del neumático = 24.26 pulgadas
2. Introduce la velocidad de tu vehículo (= 100 km/h) en el campo Velocidad del vehículo; y
3. Introduce tu relación de transmisión (calculada previamente) (=3.99) en el campo Relación de transmisión.

La calculadora te dará tus nuevas RPM a 100 km/h en la 3.ª marcha (= 3435 rpm) en el campo RPM. Observa que las nuevas RPM de las ruedas también son más bajas (= 861 rpm) que las antiguas (= 908 rpm). Esto es normal porque las ruedas nuevas son más grandes que las antiguas, ¡así que el motor y las ruedas no necesitan girar tan rápido para producir la misma velocidad del vehículo de 100 km/h!